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Los 91 movimientos en el Barcelona que demuestran la pésima gestión de Laporta en su segunda etapa

Desde que volvió Laporta se han hecho 91 movimientos en siete mercados de fichajes

Algunos jugadores como Gündogan o Vitor Roque apenas han durado un año

Laporta vuelve a incumplir otra promesa

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Miguel Zorío

Joan Laporta regresó al Barcelona para hacer un proyecto deportivo capaz de competir con el Real Madrid y pelear por todo (Liga, Champions, Copa…). Pero nada más lejos de la realidad, desde que llegó el empresario catalán a la presidencia del club blaugrana tras ganar las elecciones el 7 de marzo de 2021 han sido 91 los movimientos que se han hecho entre salidas y entradas.

Jugadores como Gündogan o Vitor Roque, que llegaron el año pasado, se marchan en este mercado estival. El alemán ha estado una temporada, mientras que el brasileño, que llegó como una estrella emergente en el mes de enero de este año, se va a marchar por la puerta de atrás sin apenas haber contado con minutos. Oriol Romeu es otro caso similar, puesto que vino la temporada pasada tras firmar una gran campaña en el Girona y se ha vuelto traspasado al conjunto de Míchel.

Esto demuestra la mala gestión de Joan Laporta en el Barcelona en esta segunda etapa. El Barça ha realizado una gran cantidad de operaciones en estos siete mercados de traspasos, pero no consigue asentar una base para tener un proyecto sólido y capaz de pelear con los grandes equipos de Europa como el Real Madrid. De los fichajes de la pasada temporada (2023-24) tan sólo continúa uno de los seis que llegaron, Íñigo Martínez. Sin olvidar que, nada más llegar, incumplió la promesa de renovar a Messi al ver que no podían pagarle su elevado salario y decidió quitarse la ficha más alta de la plantilla.

Los problemas económicos han provocado que el Barça tenga que desprenderse de su mejor jugador la temporada pasada, Ilkay Gündogan, que regresará al Manchester City tras obtener la carta de libertad por parte del club azulgrana. Laporta sigue gastando y tirando de palancas para intentar levantar al equipo en lo económico y en lo deportivo, pero por ahora sus estrategias no parecen funcionar.

Mucho ruido y pocas nueces

Este año, por el momento, llevan dos fichajes: Dani Olmo y Pau Víctor. Estamos a 22 de agosto y faltan sólo ocho días para que cierre el mercado de traspasos. Laporta ha radiado durante todo el verano el deseo de fichar a Nico Williams para el Barcelona, pero no podían pagar los 58 millones de euros de su cláusula. Ahora el gran objetivo es Rafael Leao, cuyo valor de mercado es de 90-100 millones. Y si no lo consiguen irán a por Coman o Chiesa.

El caso es que desde que volvió Laporta ha habido mucho movimiento de entradas y salidas, pero ningún jugador ha conseguido a asentarse. A día de hoy, de la plantilla de la temporada 2021-22, la primera que confecciona el actual directivo blaugrana, solamente continúan siete jugadores: Ter Stegen, Iñaki Peña, Araujo, De Jong, Ansu Fati, Pedri y Eric García. No obstante, cabe recordar que Iñaki Peña estuvo cedido en el Galatasaray en 2022 y Ansu Fati salió cedido al Brighton la pasada temporada, igual que Eric García que jugó en el Girona el curso anterior.

Aunque los últimos rumores señalan que Eric García podría volver al Girona este verano. Las informaciones aseguran que el equipo de Míchel le esperará hasta el final. Pero la realidad es que en este mercado, según Transfermarkt, el Barcelona se ha gastado 57,70 millones en dos jugadores y ha ingresado 28 millones por 10 futbolistas (Julián Araujo, Chadi Riad, Marc Guiu, Oriol Romeu, Estanis Pedrola, Sergiño Dest, Sergi Roberto, Marcos Alonso y los dos jugadores que terminaban cesión: Joao Félix y Joao Cancelo).

El proyecto hace aguas porque no hay una base clara. Prueba de ello es que el año pasado sufrieron para retener la segunda plaza ante la amenaza del Girona, mientras que en Champions cayeron frente al Paris Saint Germain en cuartos de final tras perder por 4-1 en la vuelta. Esa derrota, además, les dejó fuera del Mundial de Clubes que conllevaba un balón de oxígeno financiero de 50 millones de euros.

Pero ese dinero fue a parar a las arcas del Atlético de Madrid en vez de a las del Barça. Otro palo más para un Laporta que el año pasado despidió a Xavi, lo renovó tras ver el buen rendimiento del equipo y lo volvió a despedir en las últimas jornadas de Liga cargándose así el proyecto que estaba intentando asentar el ex jugador culé. Ahora, el club blaugrana ha empezado nuevamente de cero con Hansi Flick.

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